LA REALIDAD DE LOS SISTEMAS LEGACY
Los sistemas heredados, más conocidos como legacy, abarcan infraestructuras y aplicaciones tecnológicas desarrolladas hace décadas que, pese a su antigüedad, todavía son esenciales para muchas organizaciones. Estos sistemas no solo incluyen aplicaciones construidas en lenguajes de programación desactualizados o sobre arquitecturas monolíticas, sino también herramientas como formularios y bases de datos en Microsoft Access, o procesos corporativos gestionados con hojas de cálculo complejas en Excel.
Con el paso del tiempo, estas soluciones han empezado a mostrar deficiencias importantes, especialmente en términos de flexibilidad, seguridad e integración con tecnologías actuales. Aunque han permitido a las empresas sostener operaciones clave, los costes y la dificultad de mantener estas plataformas siguen aumentando considerablemente. Esta situación genera desafíos importantes en un entorno donde la capacidad de adaptarse y trabajar con tecnologías modernas es esencial para mantenerse competitivo.
Hoy en día, los sistemas heredados siguen desempeñando un rol predominante tanto en el sector público como en el privado. Aunque no existen cifras exactas para Europa o España, estudios recientes indican que el 95% de los CIO europeos admiten la necesidad de modernizar sus sistemas legacy para mantenerse relevantes.
En España, aunque ha crecido la adopción de herramientas como la inteligencia artificial y los servicios en la nube, el nivel de implementación es menor en comparación con el promedio europeo. Mientras solo el 27,2% de las empresas españolas utiliza servicios en la nube, en la Unión Europea la cifra alcanza el 38,9%. Esto evidencia que muchas empresas aún dependen de tecnologías antiguas, lo que trae consigo riesgos significativos.
El impacto de estas limitaciones es evidente. Un 56% de las organizaciones ha reportado pérdidas notables en ingresos debido a problemas relacionados con sus sistemas heredados, como fallos, limitaciones operativas y periodos de inactividad. Este deterioro tecnológico pone de manifiesto la importancia de modernizar para proteger el negocio y mejorar la eficiencia operativa.
La necesidad de actualizar estas plataformas no hace más que intensificarse, pero retrasar esta decisión incrementa los riesgos, limita las opciones disponibles y amplifica los costos asociados. Por ello, la transformación tecnológica de estas infraestructuras debe ser prioritaria antes de que las consecuencias se vuelvan insostenibles.
En Aubay, nos hemos consolidado como líderes en la transformación de sistemas heredados gracias a nuestra amplia experiencia y enfoque meticuloso.